Ella me preguntó por qué no confiaba en mí y no me respondió; porque no había en sus ojos un verdadero malentendido, como si fuera fácil de amar, de amarme. Estaba a punto de decir "pero mírame, mírame burdel", pero me di cuenta de que me estaba dejando la frase que siempre responde, sin siquiera pensar en ello ", pero que está bien , parada "por lo que sólo se encogió de hombros, como si no fuera importante, ya que si no me hinchó. Y dije "tengo que ir" y me fui, llevando conmigo el peso de las palabras que no decimos.

Se les prohíbe mostrar sus sentimientos y la experiencia poco a poco consolado en esta decisión. Decepcionado por la falta de escucha, herido por las reacciones de indiferencia o incomprensión de la mano de otros, convencido de que "no es hablar con uno mismo" y que derrame es inmediato "se extendido ", que nunca dejan ir a decir lo que sentía. Ellos piensan que "todas las formas que otros no tienen tiempo que perder escuchar sus historias", y es su naturaleza de ser parte de los que escuchan la de los que escuchan

No sospecho que este día que le digo que cada vez que veía las estrellas que pienso de ti que me había echado una maldición. Y puesto que cuando la reina la noche y las estrellas brillan, eso es de mis lágrimas que brillan tanto.

 

 

 

Me dejo hundirse en el dolor, no he luchado ... Y entonces un día me dije: usted todavía puede sonreír, todavía se puede caminar, usted está sano, tiene todas sus facultades. Hay un montón de cosas que hacer, mucha gente se reúna, y la alegría volvieron. La alegría de vivir. Era inexplicable. Tenía otra vez para vivir.